València, 7 feb (EFE).- La ingesta de un carotenoide presente en cítricos como la mandarina reduce un 30 % la grasa corporal, según un estudio conjunto de la empresa Biopolis, instalada en el Parc Científic de la Universitat de València (UV) y de investigadores del Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos (IATA).
El estudio, publicado en la revista Nutrients, se ha llevado a cabo en C. elegans, un gusano que comparte un alto porcentaje de sus genes con los humanos y su efecto debe probarse ahora en modelos de roedores y en humanos.
Las investigaciones se han centrado en la beta-criptoxantina, un carotenoide que da el color tan característico a la pulpa de cítricos como la mandarina y se caracteriza por poseer propiedades nutricionales y beneficiosas para la salud de los humanos.
Según la investigadora María Jesús Rodrigo, la mayoría de las frutos que la contienen, como la mandarina, el caqui o el níspero, se cultivan en el área mediterránea.
Fuentes del IATA y Biopolis han indicado que los resultados de este estudio abren "nuevas oportunidades para entender su función en la prevención de enfermedades relacionadas con el síndrome metabólico y el envejecimiento".
En Biopolis utilizan desde hace 12 años el nematodo C. elegans como un organismo sencillo para la evaluación funcional de ingredientes, por su "fácil cultivo en el laboratorio" y debido a que conserva un "elevado porcentaje de su genoma en humanos", subrayan fuentes de Biopolis.
Sin embargo, los investigadores Lorenzo Zacarías y María Jesús Rodrigo advierten de que el valor nutricional de estos compuestos no debe entenderse como "sustitutivo de los fármacos", ya que no son "curativos ni terapéuticos", sino que deben tomarse como una medida de "prevención y reducción del riesgo", resaltan. EFE
Fuente: La Vanguardia